El secretario general de la Federación de Asociaciones de Transporte de Mercancías (Fenadismer), Juan José Gil, y el presidente de la Federación Española de Agencias de Viaje, César Gutiérrez han participado este jueves en el seminario sobre la economía tras la COVID-19

El sector del transporte por carretera, de mercancías y viajeros, reclama ayudas «a corto plazo» para poder subsistir y «salir de la UVI» en la que ahora se encuentra.

Así lo han asegurado el secretario general de la Federación de Asociaciones de Transporte de Mercancías (Fenadismer), Juan José Gil, y el presidente de la Federación Española de Agencias de Viaje, César Gutiérrez.

Ambos han participado este jueves en el seminario sobre la economía tras la COVID-19, centrado en esta ocasión en el sector del transporte, organizado por la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) y la Federación de Empresas de la Rioja (FER).

El transporte de mercancías «es esencial, como se ha demostrado en la pandemia« y »vertebra España, porque el 90 por ciento se realiza por carretera« pero »aún así, a veces es un sector que a veces no tiene en consideración e incluso se promueven normativas para limitar su actividad en vez de facilitarla«, ha lamentado Gil Desde el inicio de la pandemia »la situación del transporte ha sido muy variada, porque hay subsectores que han trabajado incluso más, como el de mover productos de alimentación« pero »incluso quien ha trabajado, no lo ha hecho en buenas condiciones«, ha lamentado.

Ahora mismo, las empresas de transporte se encuentran «con un dificultades de liquidez« generado porque »tienen viajes de ida, pero no cargas de vuelta« y »ese desequilibrio genera problemas de costes«.

Ha avalado medidas tomadas por la administración, como la reducción de tiempos de descanso o la eliminación de restricciones de circulación «aunque nos hemos contratado problemas de cierre de gasolineras y áreas del descanso, porque se creía que el transportista era quien iba a contagiar a la gente».

Ha reclamado al Gobierno medidas «ya» como la extensión del cese de actividad a autónomos, la moratoria en los contratos de leasing y renting y la posibilidad de retrasar algunos trámites.

«Se ha avanzado en algunas cosas« ha dicho Gil, pero ha incidido en que su organización y otras del sector han planteado al Gobierno »un ultimátum« para que ponga en marcha otras medidas para el próximo 27 de julio o en caso contrario se plantean organizar un paro del sector.

«Pedimos medidas para garantizar que las empresas de transporte pueden sortear la crisis«, ha explicado, y ha detallado que reclaman que no se avance hacia el pago en las autovías, que no se pueda aumentar el tonelaje de los camiones, un mayor control de la competencia de empresas extranjeras y medidas efectivas para que se garanticen los pagos a los transportistas.

Además ha reclamado una mayor inspección en las empresas para que estas «no obliguen a los transportistas a hacer de mozos de almacén» y descargar sus camiones, una práctica que «genera el setenta por ciento de los problemas que tenemos con nuestros trabajadores».

Gil ha incidido en que todavía es pronto para evaluar el impacto de la crisis de la COVID-19 en el sector, pero espera que no llegue al volumen de la situación de 2008, cuando desaparecieron una cuarta parte de las empresas españolas del sector y casi 80.000 camiones.

César Gutiérrez ha incidido en la mala situación en la que se encuentra el sector de las agencias de viaje y del transporte por carretera de viajeros.

«Durante mucho tiempo la actividad ha sido cero y nuestras empresas han pasado tres meses sin ningún ingreso«, ha lamentado.

Este es un sector «que vive en gran medida del circulante, con el ingreso de hoy se paga el gasto de mañana, pero si no entra dinero se genera un gran problema« a lo que se añade que »hay que devolver lo recibido cuando hay cancelaciones«.

«Los aplazamientos fiscales y de seguros sociales han ayudado, igual que los créditos ICO, pero son medidas claramente insuficientes, porque no se pensaba que el estado de alarma iba a durar tanto«, ha asegurado.

Además tras levantar el estado de alarma «la actividad es muy limitada, mínima, y no llega a lo que esperábamos, ni palía la caida de ingresos justo cuando se acaban los aplazamientos fiscales«.

Así, ha reclamado al Gobienro otras medidas como «una moratoria se amplía« de algunas obligaciones, una reducción en el IVA turístico, que »se recalcule« el impuesto de sociedades y que se prolonguen los Erte de trabajadores hasta final de año.

Gutiérrez ha incidido en que «la recuperación de la demanda es muy lenta, mucho más de lo esperado, porque hay poco turismo internacional y el nacional también tiene poca confianza por los rebrotes« con lo que »este año la mayor parte de quien viaje lo va a hacer a segundas residencias y en transporte priva«.

Así, ha lamentado, cree que en su sector «muchas empresas no van a poder llegar al final del verano« y por ello ha pedido »un estímulo a la demanda« con bonos para viajar o beneficios fiscales a quien lo haga.

«El sector del transporte, de personas y mercancías, está en la UVI y no sabemos cómo vamos a salir de ella« ha lamentado y ha incidido en que »para hacerlo hacen falta medidas a corto plazo«.

Porque, ha concluido «ahora no se puede hablar de cosas que tengan efecto en tres o cuatro años, porque no sabemos qué empresas estarán entonces« y »a la empresa que desaparezca poco le va a importar si el turismo es sostenible o verde en el futuro«.

Fuente: https://www.larioja.com/